Hace un poco más de un par de años llegó al mundo de la belleza un producto que se popularizó gracias a su lindo aspecto y las fotografías tan bonitas que bloggers y gurus de la belleza publicaban en Instagram y Pinterest.
En ese entonces eran difíciles de conseguir y costosos, pero muy deseados, a pesar de que muchas de nosotras ni entendíamos bien para qué funcionaban, o por qué deberíamos comprarlo. Me refiero a los rodillos faciales o en inglés Facial Rollers.
Un roller facial es un masajeador para la piel, generalmente están hechos de piedras preciosas como jade o cuarzo, y de hecho si crees en los significados y poderes de los cristales puede ser tomado en consideración para la selección de tu rodillo ideal.
Los beneficios más populares y conocidos de usar rollers faciales son los siguientes:
La técnica para usar un roller facial correctamente es tener en cuenta que siempre hay que comenzar del centro del rostro hacia afuera, y sólo realizar movimientos ascendentes. El rodillo no debe “ir y venir” varias veces sobre el rostro, sino que las repeticiones siempre deben comenzar de adentro hacia afuera y de abajo hacia arriba, despegando el roller facial por completo del rostro después de cada movimiento, y volviéndo a comenzar.
Esta imagen es una excelente guía de cómo usar los rodillos faciales para masajear y drenar el rostro, cada zona de la cara está numerada y las flechas indican la dirección del movimiento.
Yo te recomiendo realizar esta rutina de roller facial sobre una mascarilla en tela o justo después de aplicar tu suero, así ayudarás a que los productos se absorban mejor. Mi recomendación es que no lo uses sobre la piel seca.